jueves, 22 de julio de 2010

Juana de Austria: El secreto


Juana de Austria, princesa de Portugal, Infanta de España, hija del Emperador Carlos V y de Isabel de Portugal, hermana del rey Felipe II y madre del futuro rey Sebastian de Portugal. Vamos, que le corría la sangre azul a raudales por sus venas.
Tenía ocho años cuando sabía tocar varios instrumentos y tocaba música profana y sacra, leía libros que le estaban prohibidos a los católicos y sabía un perfecto latín, asignatura en aquella época vedada a las mujeres, pero esto no es un hecho aislado, ya que Juana de ahora en adelante, viviría en un mundo de hombres, siendo mujer. Juana fue educada en un ambiente austero, hecho que marcaría fuertemente su carácter. Ella no deseaba nada material y nunca entendió la pompa que había en Portugal de porcelanas, joyas, vestidos, etc. El tiempo que le tocó vivir fue un tiempo de reforma espiritual, humanista, momento en que la religión estaba cambiando.

Juana se casó a los 16 años con su primo, el príncipe Juan Manuel de Portugal por poderes de su padre el Emperador Carlos, el cual intentaba un acercamiento entre la Corona portuguesa, pero el príncipe moriría dos años después de tuberculosis, momento en que estaba embarazada Juana.

Al enviudar tuvo que regresar a Castilla y su hijo como legítimo rey de Portugal tuvo que quedarse a cargo de su suegra, que también era su tía, Catalina de Austria. Nunca más se volverían a ver y solo sabría de su hijo por cuadros que le enviaban para ver como iba creciendo. Su padre, que se sentía viejo, cansado y agotado, iba a abdicar del trono y Juana tuvo que regresar a Castilla ante su llamada. Ante la ausencia de su hermano, sucesor al trono, Felipe II, que se había ido para casarse con María Tudor, Juana de Austria tuvo que asumir la Regencia de España durante cinco años, en donde demostró sus grandes dotes de gobierno.

Cuando empezó a reinar, nadie confiaba en ella, era lógico en aquella época, era una mujer y le veían débil, pero siempre estaba a su lado Francisco de Borja, su confesor. Juana era altiva y muy independiente, por lo que le costó muchas veces acatar las órdenes que le llegaban de su hermano, enfrentándose en muchas ocasiones a Felipe. Llevó su mandato con una absoluta rectitud, entregándose plenamente a los problemas militares, religiosos y políticos del momento. De tal modo, que toda la Corte empezó a admirarla sin precedentes.

Muchos príncipes quisieron contraer matrimonio con ella, pero nunca volvió a casarse. Cuando abandonó Portugal, a cambio del todo sufrimiento por perder a su hijo, solo le puso una condición a su hermano, que nunca le pidiera que se casara si ella no quería, aparte de contarle su relación con Mateo... el gran secreto que guardaba Juana.

Felipe II, mandó arrestar a su propio hijo, nacido de su primer matrimonio con María de Portugal, Carlos de Austria, príncipe de Asturias, el cual moría seis meses después encerrado y solo, por inanición. Este hecho nunca se lo perdonaría Juana.

Con la ayuda de Francisco de Borja y su amigo San Ignacio de Loyola, Juana de Austria había ingresado en los jesuitas durante la Regencia, convirtiéndose en la única mujer de la historia de la compañía. El nombre con el que ingresó era Mateo Sánchez y enviaba las cartas posteriores con el seudónimo de Montoya. En vida de Juana de Austria, nunca nadie supo su secreto, ni siquiera la Santa Sede.

Juana había nacido en Madrid el 24 de junio de 1536 en un antiguo Palacio en donde más tarde fundó el Real Monasterio de la Visitación (actual de las Descalzas Reales).

Falleció el 7 de septiembre de 1573 en El Escorial, dejando en su testamento que fuera enterrada en el monasterio que había fundado. Allí permanece su magnífico sepulcro del que hablaremos cuando llegue el artículo del Monasterio de las Descalzas Reales.

Juana de Austria fue nieta de rey, hija de Emperador, hermana de rey, esposa de príncipe y madre de rey, y la única mujer que ha ingresado en la compañía de los jesuitas en su historia.



martes, 20 de julio de 2010

Estatua de Felipe IV



En el centro de la plaza de Oriente, nos encontramos ante una de las más bellas estatuas ecuestres del mundo, la estatua de Felipe IV, del escultor Pedro Tacca, el mismo autor de la estatua de Felipe III que se encuentra en la Plaza Mayor y la colaboración de Juan Martínez Montañés, autor del busto del monarca. Velázquez pintó un cuadro de Felipe IV que se envió al escultor para la construcción de la obra, pero el encargo del monarca, exigía algo difícil y excepcional, quería que el caballo tuviera las dos patas delanteras levantadas, un difícil problema de equilibrio, pero fue Galileo Galilei el que ofreció la solución: hacer maciza la parte posterior del caballo y en hueco la parte delantera.
La estatua se construyó en 1640 y estuvo ubicada en el Jardín de la Reina, uno de los patrios del Palacio del Buen Retiro y después fue trasladada al Real Alcázar de Madrid hasta que fue pasto de las llamas en 1734 y volvió a su su enclave original del Palacio del Buen Retiro. Con tanto traslado, los madrileños pudieron leer en un panfleto que se instaló en la casa de la Panadería en la Plaza Mayor que decía:

¿A qué vino el Sr. D. Juan?
A bajar el caballo y subir el Pan.
Pan y carne a quince y once,
Como fue el año pasado;
Con que nada se ha bajado
Sino el caballo de bronce.


En 1843 se emplazó en el lugar definitivo donde se encuentra hoy.

Estatua ecuestre de Felipe IV en el centro de la Plaza de Oriente



lunes, 19 de julio de 2010

Pequeño incendio en el hotel Ritz



MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -

Un incendio de pequeñas dimensiones desencadenado esta madrugada en el hotel Ritz de Madrid, y que no ha causado daños personales, ha provocado que los responsables del hotel hayan tenido que evacuar a todos los huéspedes, informaron a Europa Press fuentes de Emergencias Madrid y del propio establecimiento.

En torno a la 1.45 de esta madrugada un incendio de pequeñas dimensiones se desencadenó en las cocinas del hotel, situadas en la planta baja. El fuego fue pequeñas dimensiones y pudo ser sofocado rápidamente por los propios empleados del hotel y por efectivos policiales que se trasladaron en un primer momento hasta allí.

Sin embargo, el fuego provocó una gran humareda que se extendió por la chimenea a amplias zonas del hotel, lo que llevó a la dirección del establecimiento a pedir a todos sus huéspedes que se trasladaran a los jardines del hotel para evitar daños.

Hasta el lugar se trasladaron tres dotaciones de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, que si bien no tuvieron que realizar labores de extinción propiamente dichas, sí tuvieron que emplearse a fondo para extraer la gran cantidad de humo acumulada en el interior del edificio, situado en la céntrica Plaza de la Lealtad de la capital.

Hasta el lugar se trasladaron de forma preventiva efectivos del Samur Protección Civil, que sin embargo no tuvieron que realizar ninguna intervención.

Un portavoz del hotel afirmó que por el momento desconocen las causas exactas por las que se origino el pequeño incendio, si bien creen que pudo tener su origen en alguna de las operaciones que se realizaron en las cocinas del hotel.

Este portavoz confirmó que en torno a las 4.45 de la madrugada los huéspedes aún seguían en los jardines del hotel, si bien informó de que los bomberos estaban recogiendo sus instrumentos y se mostró confiado de que en una hora pudieran indicar a sus clientes que volver a sus habitaciones ya es seguro.

martes, 13 de julio de 2010

Madrid recibe a la Roja



El recibimiento que Madrid dio a la Selección Española fue espectacular. No existen calificativos para poder describir lo que ocurrió en nuestra ciudad. 300.000 personas?, un millón?, quizás dos?, da igual, el caso es que todo Madrid estaba en la calle y en estas imágenes os lo puedo demostrar. De nuevo la Gran Vía quedó cortada en el día que Madrid recibió a los más grandes del fútbol mundial. Pero daba igual que fuera la Gran Vía, que Princesa, que Cibeles, Neptuno, Recoletos, Bailén, etc. Todas las calles se encontraban igual.

Desde primeras horas de la tarde se encontraban todas las calles llenas de gente, ocupando las aceras del recorrido por donde pasarían los jugadores de la Roja. El calor hacía estragos en las calles de Madrid, la gente con ropa ligera, botellas de agua, sombreros, banderas y casi al unísono, vestida de rojigualda, iban ocupando todos los rincones por donde más tarde pasaría el autobús que llevaría en cabalgata a todos los integrantes de la Selección Española.




Las inmediaciones de la explanada del Puente del Rey era totalmente inaccesibles desde horas antes de que llegaran los jugadores, que por cierto fueron dos horas después de lo estipulado. Podemos ver la Puerta de San Vicente como nunca se la hubiera imaginado Sabatini.








La explanada era un auténtico hervidero humano, donde una vez que se estaba dentro, era imposible escapar, ya que no cabía una aguja entre persona y persona. Podéis observar toda la explanada hasta el puente de Segovia como parece una manta humana con los colores rojigualda.








Veamos un par de vídeos del evento.